La escritura académica de «Los ventrílocuos»

 

«No se investiga leyendo libros,

se investiga citándolos,

lo que citamos ya investigó por nosotros»

"El que cita le hace de ventrílocuo a los extraños de los libros"

 

(Battilana 2023)

 

 

 

 

Con respecto a este ensayo sociológico (Alvarez 1990) debemos recomendar otro ensayo (Vicente 1992) que dice sobre este que estamos analizando que no rivaliza con la investigación (Pérez 1997) aquí Pérez atestigua que Vicente, según (Carlos 1986), ha comentado anteriormente los aspectos menos advertidos de este ensayo. Aclara el autor que no debemos reproducir investigaciones incompletas (Resero 2002) que no hayan sido anteriormente refrendadas por ensayos académicos pertinaces (según dice Rivero 2010) Además de estas condiciones especiales tenemos a Singerman oponiéndose a Garber (Milton 2019), (Roterman 2008) y (Agustín 2006). Los que se oponen deberán considerarse observadores (Kats 2021) o no, pues la escritura que se articula debe adscribirse al resumen (según Pratz 2001) En el 2001 comienza esta odisea analítica, otra vez nos encontramos con las opiniones de Pratz pero referidas por Telermann (Telermann 2002) o como dice Agustín «escribiremos libros investigando solamente libros» (Agustín 2006) Es Agustín quien logra encaminarnos bien adentro de lo que no es «comentar en ausencia» (Agustín 2006) Esta advertencia de Agustín, que consideramos tomada de Moro (Moro 2001) como ya lo habíamos leído en Fantino (Fantino 1980) La estructura del ensayo académico no se completa sin la anuencia en la certeza, parafraseamos a Rilque (Rilque 1995). No es necesario aclarar, como dice Vilkerman (Vilkerman 2022), toda vez que repitamos se lo debemos al esfuerzo de otro (Spencer 1999) esta expresión de Spencer no se refiere a la totalidad como sí lo hace Cabrera cuando en un modo que rivaliza con la brillantez comenta «debemos replegarnos para poder leer mejor» (Cabrera 2022) En este estado de cosas es que cada escrito en su sendero (Méndez 2001) (2001 es un año impregnado de creatividad expresiva (Bacher 2001)) Los años de investigación pasan (Lamen 2002) y nos dejan, continúa diciendo Lamen. Bacher coincide con Lamen pero lo expresa de otro modo «nos dejan, son años» (Bacher 2001) La totalidad no esta tratada como tal (Flecher 2007) Flecher con este comentario inaugura una secuencia de investigaciones acerca de la realidad como confianza (Flecher toma un concepto de Rotter (Rotter 1997)) Y es en torno al principio «la realidad como confianza» que se abre un espacio más amplio para los investigadores, remitimos a Aliberti (Aliberti 2006) ¿Es la realidad una confianza? se atreve Rotter casi al borde del error conceptual, así lo comenta Fisher (Fisher 1998) contestándole a Cabrera (Cabrera no le responde si no es por escrito) Y tomamos de Cabrera una sentencia dinámica opuesta al ensayo que están comentando ellos, nosotros preferimos que hablen ellos (Sigman 2023) Gracias a Sigman y a su arriesgado «nosotros preferimos que hablen ellos» queda ajustado el marco, y desde afuera de este marco que le da voz a ellos nosotros nos acomodamos para reproducirlos, reproducir no cansa, cansa pensar solos (Dalamberg 2023).

Vamos llegando a las conclusiones dicen Garber, Tell, Grimberg y otros. Llegamos gracias a sus voces (Ramen 2021) Reproducirlos a todos es lo que nos merecemos y para ello tomamos tanto que dicen, ningún ensayo da tanto lugar como es necesario a sus voces que nos guían en ausencia de más voces. "Que hablen las citas por nosotros" (Vilas 1982). El lugar que ocupan estas voces, ya lo decía Valentín (Valentín 2002) es un lugar sin riesgos, sin apologéticas (Karmann 2008) y lo repite Zamper en (Zamper 2009) No puede faltar el enigma planteado por Popoff (Popoff 2001) que al decir de muchos «es un enigma humano dar espacio a la voz del investigador siempre y cuando él sea la voz de los libros, o la voz de las citas» (Zamper en respuesta a Popoff) Esta respuesta ha repercutido en el mundo de la producción profesional de escritos, los ha hecho tambalear, entonces aparece Popoff y golpea cuando escribe «no» (Popoff 2001) dicho esto, que no se atrevió a decir en su libro anterior, y creemos que no se atrevió pues no lo vio escrito en Valentín (Valentín 2002) al no decirlo Valentín, Popoff no lo repitió en su posterior edición, hacía falta el prestigio de Valentín diciendo ese «no» para que la escritura prestigiada por la infinita genealogía nos asegure el respeto por, quién sabe, las voces de un 2024, un 2026 o incluso un 2030 que en su afán de clonar lo que se ha dicho bien, y se ha escrito por la enésimas de las enésimas, se haga realidad a una realidad única sin espacios equívocos. Qué ha hecho la impertinencia creativa por la escritura sino identificarla indebidamente (Seer 2018) Sí, dice y Nosser le responde a este concepto en «Autenticidad como esquema» (Nosser 2020)Así es como nos amplían el panorama todos estos autores. Seer y Nosser se encuentran de tal modo integrados en el discurso académico que su inspiración técnica plantea una estrategia, leemos esto así en Sinoyhiro (Nokomo 2021) No todos podemos (Popoff 2001) alinearnos con (Nésttor 2020) las estructuras de la inteligencia (Méndez 2000). Podemos cuidarnos más cuando argumentamos (Méndez 2000) una escritura cuidadosa es siempre una escritura (Méndez 2000). Con Méndez podemos descubrir las infinitas implicancias de aparecer exclusivamente como citas que no nos citan a nosotros (Méndez 2000) pues citándonos tejemos un tejido (Zamper 2009) perteneciente a otro tejido, los tejidos no nos pertenecen (Sembrano 1999) Sembrano en su obra «Los tejidos perpendiculares» cita mucho menos cuidadosamente que nosotros. En «Confesiones sintagmáticas» (Sembrano 1997) refuta y ordena las dificultades normativas de citar como fundamento fundacional de cómo demostramos que hemos sólo leído y no leído que citamos (Rotter 2002) Esta obra de Rotter nos cita todo, cita y cita como el único antecedente de que «hemos estado allí» (Mármol 2003). Preferimos entonces aclarar dando lugar y voz a estos autores, quizá sin lograr del todo desaparecer del discurso, agradeciendo la concurrencia, escasa tal vez, de todas estas voces (Battilana 2023), la cita nos da esa contundente invisibilidad (Battilana 2023), nos hace empáticos (Battilana 2023), con libros se investigan libros que a la vez investigaron de libros (Battilana 2023) no se investiga leyendo libros, así se investiga una consecución de linajes (Battilana 2023) la escritura endogámica favorece a los mediocres (Battilana 2023) ¿Tanto citan los que no leen? (Battilana 2090 )

 

 

Daniel Battilana (Battilana 2023)