Romper el “en sí” de la poesía proviene de una adherencia
entre las preposiciones y los adjetivos que se miran en sí; los sustantivos
tiemblan en esa “impresencia” que tanto seduce a los narradores, creer tanto
como fijarse al poder transitorio de lo que se entiende, la isla excepcional de
una poesía exiliada, exiliada en el papel. Corté elevadamente con esa luciérnaga curiosa, le quité el mando, está la idea donde se manda y la idea donde se obedece: hay que mandar en la idea.
sábado, 27 de abril de 2013
jueves, 25 de abril de 2013
La feria de paja y las editoriales con peaje
Uno no se debe privar de que lo publiquen privadamente; de ser
así, será invitado privadamente por privadas mentes que le asegurarán cuán
necesario es mostrar lo que costó su libro privado; privado de cierto dinero
descubrirá que ser tan desmesuradamente solicitado para los festivales y ferias
era para él y no para su poesía que seguirá siendo tan privada o aún más hasta
que junte capitales y dinerales que lo hagan un invitable de los privados que
ahora han creado un escenario por donde se llega por angosto camino privado
pues avísenle a los pibes y pibas que hay que pagar peaje poético… Los festivales y ferias monopolizados por las editoriales pueden encerderte un poco la paja pero es con dinerillos que se hacen los fuegos y o las hogueras literarias. Hay que pagar peaje y pasar sin poesía.
Daniel Battilana
La Argentina de paja
APOSTILLAS
La nueva genitalidad mental hace a un ciudadano fecundable.
Una mente que viola a otra
Una idea que engendra ignorancias
Muchas mentes compartiendo un loco placer
No habría sensatez genital ni genitalidad sensata sin la
mente ciudadana
Muchas mentes abusan de una idea y no acaban
La idea no encuentra a quien abusar
Las mentes castradas reclaman un harén inclusivo
¿Genitalmente excluyente?
Mentes que se masturban para no saltar
Genitales farsantes intentan sodomizar al soberano
Muchas ignorancias fecundándose
Se nacionalizan genitales indocumentados
El subdesarrollado ya dispone de su huevo
Daniel Battilana
lunes, 22 de abril de 2013
Un sindicato para Batman
LA INDUSTRIA DEL IMPUESTO EN LA ARGENTINA y EL CAPITALISMO SINDICAL
Batman es un ejemplo de luchador de clase alta (psicópata industrial o capitalista gótico dispuesto a defender sus empresas…). Batman es el Estado que cuida de Robin (humilde gorrión con sed de venganza y resentido porque no puede volver a trabajar de trapecista; la muerte de los padres representa la desaparición de los partidos tradicionales). Robin es el pueblo que ahora adquiere el estatus de colectividad, de colectivo embriagado por la tecnología. La urbe para esta relación entre Batman y Robin es la anacrónica ciudad Gótica. Ciudad Gótica es un país-fábrica donde viven encapsulados y escasamente alumbrados, una policía impotente que depende de una estrella artificial que Batman prende de vez en cuando… El Estado es una estrella!!! Esta señal luminosa tranquiliza a los habitantes –la policía es un interfaz de control de bases bastante inestable pues se conforma de “víctimas empleadas”. Batman enciende su señal cuando acechan riesgos personificados por otras víctimas con patologías muy surrealistas y algo entrañables. Quienes son estos villanos simbólicos, son también aspectos individuales de la resistencia valvular del colectivo gótico. Batman tiene como única familia y referente del pasado a su mayordomo quien lo asiste y hasta lo suplanta. Alfred oficia de sindicato, el mediador eficaz entre la historia y el futuro de los asalariados; él es un eterno asalariado al que se le permite, por lealtad, mirar por el visillo a escondidas, otear la cueva del poder, tiene un llavero poblado de puertas, puertas con nombre.
Este mayordomo se encarga de restablecer las conexiones que Batman necesitará para adquirir un recurso escaso pero renovable: la libertad; parecido a éste hay otro no renovable y escaso: el tiempo, el orgánico, lo que somos. La libertad de Mr. Murciélago está oculta, todo es máscara en Batman, la ropa, el coche, su dolor, es también un intelectual con el poder que le confiere la tradición del dinero (el dinero es una tradición, una tecnología indiferente que se adhiere a la naturaleza de las cosas embargándolas de necesidad) y de artefactos (gadgets) embebidos de marcialidad: Batman es un Estado y es, cuando se viste y arranca su coche cohete 4x4, parecido a un tanque que lo enajena y lo escinde confortablemente dándole exclusividad, un parapolicial. Cuando beligeran con Robin, lo hacen como un comando, es la paradoja del estado reprimiendo al trapecista, al civil en riesgo… Desquiciados por el deber, toman las calles y parecen amigos, parecen lo mismo, como ahora, el Estado quiere parecerse a sus súbditos.
Daniel Battilana
APOSTILLAS
“La espontaneidad triunfa; la totalidad cultural es ahora objeto en el museo del hombre”
“El dinero es una tradición, una tecnología indiferente que se adhiere a la naturaleza de las cosas embargándolas de necesidad.”
“La hipercomunicación torna al sujeto un minúsculo pretendiente, la tecnología lo consuela, lo carga de creencia… se anula la multiplicidad con la “mucha multiplicidad”. “El mensaje ya no existe, ha sido remplazado por la ley.”
"Alfred tiene un llavero poblado de puertas, puertas con nombre."
“La publicidad es una mentira pública concensuada, la política también, miente en público y dice la verdad en privado.”
Daniel Battilana
martes, 16 de abril de 2013
Valor
“Olvidamos
que fue nuestro propio lenguaje el creador del dinero, permanecemos
indiferentes hasta que la noción de “valor” se nos materializa en él, la
opción de esta elección era habitar el lenguaje para desnaturalizarnos o
que nos habite el dinero para inutilizarnos: hablar y escribir son
operaciones mercantiles del espíritu con la sustancia."
Daniel Battilana. (Frag de frog)
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