Inchauspe
a caballo de Troya
Me
pasaron una nota, no es un ensayo, el ensayo suele escuchar, es un
caballo de Troya; a riesgo de que se tergiverse, si el título de mi
ensayo que escucha dice “Inchauspe a
caballo” es porque debemos primero comprender la vastedad del
instrumento “caballo de Troya” esto es, cualquier envase, tenga o
no tenga solidez, tenga o no tenga forma puede servir como eso,
nuestro cuerpo sería el envase de nuestros deseos hasta de la soledad sería el envase, caballo de Troya en
el mundo; un poema podría ser el caballo de Troya de algo sustancial
o insustancial, como la idea o la emoción subrepticiamente entregada
en ese sobre mentiroso... el autor fuerza la inscripción de
Inchauspe como una revelación secreta que en los noventa (a la
poesía de los 90 que ahora está tan de moda diluir como que no
existió tal cosa) parece haber operado desde el núcleo oscuro de la
vida hasta el núcleo oscuro de este y un par de autores más que en
la selección con que ejemplifican lo que les interesa de Inchauspe
es visibilizarse como quien se arrima al piola de la foto; evidencian
así cuánto lo plagiaron, extensivamente y cómo lo usan de "marco
invisible" para presentarse de igual propósito poético y de
calidad. Ver esta estratagema propia de marketing lingüistico, decir
por ejemplo que en Inchauspe no hay psicologismos, decir que la
ausencia absoluta de barroquismos innecesarios y que aunque toda su
obra “está marcada por un yo” ese yo no es psicologista (¡¡¡?).
Con las urgencias que me permiten no pertenecer al mundo de la
cultura, ni al mundo de la música, ni al mundo del arte, ni al mundo
académico, menos al mundo de la poesía, comprendo exhaustivamente
por todas mis no pertenencias que no se ha compendiado aún el
fárrago y apilamiento de “lugares comunes” frases y expresiones
que aunque el incauto pretenda interpretar como coloquiales ponen a
esa poesía siempre a menos de un punto de perder, y no lo hace por
el manejo, el manejo donde la cadencia y el talento protectivo de
Inchaspe le permitió a su escritura cual un anillo de tul... gustar
tanto a esa elite de dormilones y asustadizos poetas. Pobre Inchauspe
si supiera que lo iban a usar como pony
de Troya
para "decir nada" en los 90... O para sacarse una foto con
él previo enjuague y aseo de su verdadera imagen... Porque me
pregunto ¿cuántos de estos “rescatadores” "restauradores de lo sensible de la simpleza" de su obra lo tendría
al intenso y conflictivo poeta de amigo? Hay muchas tiranías y una
de esas es la que viene enfundada de profesores de letras; esta
censura corporativa habla y propugna sistemas de legitimación
asociados a “peaje editorial” que, y se necesitará una
“arqueología” de esta economía cultural, está siendo
condicionante a tener en cuenta para muchos que dejan entrar este caballo de Troya académico en sus obras. Algo más, no nos debe pasar
inadvertido el hecho de que Inchauspe haya editado sólo dos libros,
esto permite aprovechar una aparente homogeneidad y supuesta unidad
de obra para ver una imagen pequeña que les resulta más fácil de
usar como bandera que si fuera una obra heterogénea y vasta, una
tela así no sirve para bandera y da mucho trabajo izar con palabras ¿Cuál sería el envase de lo invisible?
Daniel
Battilana
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